de bambú y disfrute del fragante aroma del té de Alishan.
Nacido en 1994, Xu Jin-Jia es el dueño de tercera generación. Su abuelo, Xu Cheng, junto con su padre, Xu Cong-Xiang, fueron de los primeros agricultores locales en cultivar esta tierra. Al principio, Ruili producía principalmente lirios de día y brotes de bambú. Sin embargo, en 1980, la familia cambió al cultivo de té, nombrando originalmente al negocio “Té Mingyuan “. Después de años de dedicación, el dueño de segunda generación, Xu Cong-Xiang, fue reconocido como uno de los “Diez Jóvenes Agricultores Sobresalientes” y recibió el prestigioso “Premio Shennong”. Este reconocimiento sentó las bases para disfrutar la rica esencia de tres generaciones en cada sorbo de su té.
Introducción
Ubicada a 23.5°N, en el cinturón verde subtropical, la zona de Alishan está envuelta en niebla, con grandes diferencias de temperatura entre el día y la noche y poca exposición al sol. Estas condiciones naturales reducen el amargor de las catequinas, haciendo que los brotes de té sean tiernos y ricos en pectina, con un color verde vibrante y un aroma natural a té. El té cultivado aquí revela sabores en capas de principio a fin, y cada sorbo parece reflejar las profundas estaciones de la vida junto con el amanecer y el atardecer de Alishan.
Sus tés artesanales incluyen el “Té Oolong de Alta Montaña”, también conocido como Té Oolong de Tallo Blando, con sus vibrantes hojas secas de un verde vivo. Otra opción es el “Té Jin Xuan”, conocido como “Té Oolong Lechoso”, una variedad distintivamente taiwanesa con un tono verde fresco y un sutil aroma a leche. Originario de la región de Alishan, el té Jin Xuan tiene un aroma cautivador y un sabor armonioso, con una infusión de té clara y brillante. Su “Té Negro de Alishan”, hecho con hojas de Jin Xuan, se caracteriza por sus notas florales y un gusto rico y suave. Además, no puedes dejar de probar su té añejo, una exquisitez suave y madurada con el tiempo.
Características del Agroturismo
Té
Adhiriéndose a una filosofía de cultivo seguro, puro y ecológico, la finca promueve activamente el turismo rural del té y experiencias agrícolas inmersivas. Han desarrollado experiencias que abarcan seis industrias y estimulan los cinco sentidos para compartir la cultura del té y la educación agrícola.
Xu Jin-Jia cree que la mejor manera de entender el té es visitando los jardines, conectando con la naturaleza y viviendo la experiencia de la granja directamente. Desde la recolección hasta su procesamiento en múltiples etapas, para que así los visitantes comprendan el arte del té. En consonancia con la “economía de servicios” de la industria terciaria, ofrecen experiencias prácticas como hacer té a mano, enrollarlo, participar en ceremonias del té y mezclar sabores. Estas actividades requieren reserva, con un grupo mínimo de cuatro personas. Cada sesión dura aproximadamente entre 90 y 120 minutos y se puede reservar de mayo a octubre de cada año.
